Hay muchas características que hacen de Sudáfrica un lugar perfecto para hacer safaris fotográficos. Por ubicarse entre dos océanos; por tener tierras de gran antigüedad ricas en minerales; por presentar montañas, costas litorales hermosas y ríos; y por ser poseedora de la más extraordinaria flora y fauna, Sudáfrica ofrece paisajes que vale la pena recorrer de punta a punta.
En Sudáfrica, los safaris fotográficos organizados en áreas de gran riqueza natural, como lo son sus parques nacionales, poseen como atractivo principal el recorrer zonas de flora autóctona (con acacias y mopanes) y, sobre todo, el poder ver exóticos animales en libertad. En Sudáfrica se destacan los denominados “big five”: elefantes, leones, jirafas, leopardos y búfalos. En las áreas acuáticas, es posible encontrar cocodrilos, hipopótamos y herbívoros como los kobos e impalas. También se pueden observar todo tipo de aves, entre las cuales sobresalen los gansos egipcios, las águilas coronadas y los halcones.
Varios de los parques nacionales de Sudáfrica cuentan con campings con bungalows y ofrecen las comidas, y los vehículos y guías para el safari. Dichos safaris por Sudáfrica, pueden llevarse a cabo durante todo un día o más días, pudiendo amoldar el programa a las preferencias y necesidades del turista. Durante el trayecto se hacen varias paradas, ya sea para contemplar las espectaculares vistas, tomar fotografías o reponer fuerzas.
Una de las más interesantes alternativas en Sudáfrica es combinar unos días de safari fotográfico en algún parque o reserva, con otros días de descanso en las playas espectaculares de las costas o de las islas de Sudáfrica.
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